¡Haz algo: Ora, evangeliza y discipula! (2-2)

Francisco Aular        

faular @hotmail.com

Lectura devocional: Colosenses 4:1-6

Oren también por nosotros, para que 

Dios nos dé muchas oportunidades 

para hablar de su ministerioso plan 

acerca de Cristo. Por eso estoy aquí 

en cadenas. Colosenses 4:2 (NTV)

“A través de Cristo, Dios en su gracia esta edificando un reino de personas redimidas, para gozo de ellas y para gloria de Él”. Kendell Easley. “El misterioso plan acerca de Cristo…” del cual nos habla Pablo, en la cita de Colosenses, es necesario explicarlo. No comenzó en Belén, sino “antes de la fundación del mundo”. El mismo JESÚS, comenzó su ministerio terrenal diciendo: “¡Por fin ha llegado el tiempo prometido por Dios! –anunciaba-. ¡El reino de Dios está cerca! ¡Arrepiéntase de sus pecados y crean la Buena Noticia!”. (Marcos 1:15,NTV). 

“¡El reino de Dios esta cerca!” ¡Este es el “email” de DIOS a nosotros los seres humanos! JESÚS, en la oración del Él Padre Nuestro, dijo: “Venga tu reino, Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra”. (Mateo 6:10, RV60), y, en Su oración sacerdotal, la noche que fue entregado, oró: “Ahora Padre, llévame a la gloria que compartíamos antes de que comenzara el mundo”. (Juan 17:5,NTV). En ese reino literal: JESÚS es el REY, ahora está sentado en Su trono, y está formando un pueblo de personas redimidas para reinar con Él. 

Nosotros cantamos con mucho gozo y debemos hacerlo un himo que se llama: “Somos el pueblo de Dios”. ¡Eso somos ni más ni menos! Y Sus agencias del reino, son las iglesias locales a través del mundo. Oremos por la extensión del reino de DIOS y que nosotros seamos usados en gran manera. Evangelicemos llevando esta Buena Noticia, JESÚS pagó el precio y nos regala la ciudadanía en Su reino. Discipulemos a todo nuevo creyente para que llegue a ser un discípulo del reino de DIOS en esta tierra, los Apóstoles anduvieron con el SEÑOR, y luego la Biblia nos dice: “Luego los envió para que anunciaran a todos acerca del reino de Dios”. (Lucas 9:2ª).

Esto nos lleva a lo que llamamos “la fuerza impulsora del reino” que es la Gran Comisión: 

“Se me ha dado toda autoridad en 

el cielo y en la tierra. Por tanto vayan

 y hagan discípulos de todas las naciones, 

bautizándolos en el nombre del Padre y del

Hijo y del Espíritu Santo.

Enseñén a los nuevo discípulos 

a obedecer todos los mandatos que

les he dado. Y tengan por seguro esto:

que estoy con ustedes siempre, 

hasta el fin de los tiempos”.

 (Mateo 28:18b-20).

Durante los últimos tres siglos: las iglesias y las juntas misioneras, entendieron muy bien el “por tanto vayan”, y se esforzaron como nunca antes enviando a los misioneros a las naciones, y desde luego, gracias al SEÑOR, somos frutos de ese gran esfuerzo. Sin embargo, es importantísimo, no solo “ir”, sino también estar seguro de obedecer: “y hagan discípulos de todas las naciones”. Por lo tanto,  el “ir” me pone en la ruta, “hacer discípulos” es la tarea. Mi labor en la expansión del reino de DIOS, debe ser como lo entendió el apóstol Pablo: 

“Por lo tanto, hablamos a otros de Cristo,

 advertimos a todos y enseñamos a todos 

con toda la sabiduría que Dios nos ha 

dado. Queremos presentarlos a Dios 

perfectos en su relación con Cristo. 

Es por eso que trabajo y lucho con 

tanto empeño, apoyado en el gran

poder de Cristo que actúa dentro 

de mí”. (Colosenses 1:28,29,NTV). 

¡Ser y hacer discípulos espirituales es el cumplimiento de la Gran Comisión! Para la transformación de nosotros y el Mundo. Esto se logra cuando activamos la oración, la evangelización y el discipulado como etilo de vida. Por lo tanto: ¡Haz algo: ora, evangeliza y discipula!

¡Adelante, siempre adelante!

Oración:

Amado PADRE:

¡Quien pudiera vivir mil vidas para vivirla para ti! El Evangelio del reino de DIOS, la Buena Noticia, está en marcha. Por favor, SEÑOR te confieso mi cobardía y te pido de todo corazón, ayúdame a testificar de tu gracia, y si tú así los has decidido a morir honrándote, en el nombre de JESÚS, amén.

Perla de hoy:

Un discípulo es la persona crucificada con CRISTO, pero resucitada con Él, y vive para la gloria de DIOS su vida triunfante, en lo que es y en lo que hace.

Interacción:

¿Qué me dice DIOS hoy por medio de su Palabra?

¿Existe alguna promesa a la cual pueda aferrarme?

¿Existe alguna lección por aprender?

¿Existe alguna bendición para disfrutar?

¿Existe algún mandamiento a obedecer?

¿Existe algún pecado a evitar?

¿Existe algún pensamiento para llevarlo conmigo?