“SOLA SCRIPTURA”

Francisco Aular

faular @hotmail.com

Lectura devocional: Juan 1:1-18

En el principio la Palabra ya existía. La Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios. Juan 1:1(NTV)

Este domingo 29 de octubre las iglesias bautistas hispanas de la Convención Nacional Bautista del Canadá, de la Zona Metropolitana del Gran Toronto, y que son parte de la Visión 20/20, nos uniremos para la Magna Celebración de los 500 años de la Reforma Protestante en todo el mundo occidental. Indudablemente será uno de los momentos más significativos en la corta historia de nuestras iglesias hispanas en este país.

Entonces oiremos la explicación de las cinco “Solas”: SOLA ESCRITURA. SOLO CRISTO. SOLA GRACIA. SOLO FE Y SOLI DEO GLORIA. En esta cinco frases, se resume la teología de nuestros reformadores, desde luego, ellos no inventaron estas verdades, simplemente, fueron a la Biblia y allí estaban, están y estarán.

Comenzamos por “Sola Escritura” esta doctrina nos dice -con un basamento bíblico extenso que involucra a todos los libros de la Biblia-, que la Biblia es por sí sola la autoridad suprema en asuntos de fe y práctica, “porque la Santa Biblia fue escrita por hombres divinamente inspirados y es el registro que Dios hace de Sí mismo al ser humano…Su autor es Dios, su fin es la salvación, y su tema es la verdad sin ninguna mezcla de error…Revela los principios por los cuales Dios nos juzga; y por lo tanto será hasta el fin del mundo, el verdadero centro de la unión cristiana, y la norma suprema por la cual toda conducta humana, credos, y opiniones religiosas serán juzgados…” (Fe y Mensaje bautistas, pág.7).

Cuando Martín Lutero, descubre como tener paz con Dios por medio de la fe, leído y subrayado en su Biblia, es la Palabra de Dios que lo ilumina y el Espíritu Santo que lo guía. Por primera vez en su largo caminar como un religioso sincero, había llego al Faro luminoso de las Sagradas Escritura, y de aquí, no lo separaría nada, ni nadie.

Con tal convicción en el año 1521, se hace un concilio de la iglesia popular o imperial, llamado la Dieta de Worms, allí Martín Lutero, exclama que su conciencia estaba cautiva y apegada a la “Sola Scriptura”, y se puso en pie delante de aquel tribunal y dijo: “Al menos que se me convenza mediante testimonios de la Escritura, y claros argumentos de la razón,-porque no le creo ni al Papa, ni a los concilios, ya que está demostrado que a menudo han errado y se contradicen entre ellos-, estoy vencido por los textos de la Sagrada Escritura que he citado, y mi contienda está ligada a la Palabra de Dios.” ¡Un hombre está de frente al tribunal que lo va a sentenciar a muerte pero la Palabra de Dios le da fortaleza para estar firme y sin fluctuar porque sabe en quien a creído por la Palabra de Dios!

Uno se queda abismado aún a cinco siglos de esta historia que estamos conmemorando, sin embargo, puede ir más allá del siglo XVI, y encontrarse con el Salmo 119:18 “Abre mis ojos, para que vea las verdades maravillosas que hay en tus enseñanzas.” (NTV).

Puede encontrarse con el apóstol Pablo al entrar en el Nuevo Testamento, aconsejando a un discípulo, sobre la importancia y pertinencia de las Sagradas Escrituras:

“Desde la niñez, se te han enseñado las sagradas Escrituras, las cuales te han dado la sabiduría para recibir la salvación que viene por confiar en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios y es útil para enseñarnos lo que es verdad y para hacernos ver lo que está mal en nuestra vida. Nos corrige cuando estamos equivocados y nos enseña a hacer lo correcto.” (2 Timoteo 3:15,16, NTV).

Me parece que Lutero, veía en la Palabra de Dios, al mismo JESÚS, según lo describe el apóstol Juan: “En el principio la Palabra ya existía. La Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios.” (Juan 1:1,NTV). ¡Esa Palabra es la Segunda Persona de la Trinidad: JESÚS!

“Porque, por medio de él, Dios creó todo lo que existe

 en los lugares celestiales y en la tierra.

Hizo las cosas que podemos ver

y las que no podemos ver,

tales como tronos, reinos, gobernantes

y autoridades del mundo invisible.

Todo fue creado por medio de él y para él.

Él ya existía antes de todas las cosas

y mantiene unida toda la creación.”

(Colosenses 1:16,17, NTV)

De manera, que la Palabra Viva está con nosotros y en nosotros, el lema de Solo la Escritura, nos hace que volvamos de nuevo a la Palabra de Dios, que ella sea relevante en todo lo que hagamos en la obra de Dios, ignorar la Biblia es ignorar a CRISTO mismo, por lo tanto, frente a la Biblia, debemos: Oírla. Leerla. Estudiarla. Memorizarla. Meditarla. Aplicarla.

En esta conmemoración de los 500 años, es una buen oportunidad para volver a las Sagradas Escrituras en nuestro púlpitos y en los que están en las sillas. Como bien lo dijo Martín Lutero en su famoso himno, “Castillo Fuerte es nuestro Dios”…La Palabra de Dios pone al mismísimo diablo en su sitio:

“¡Que muestre su vigor Satán y su furor!

Dañarnos no podrá, pues condenado es ya

Por la Palabra Santa.”

Porque se cumpla en nosotros esta “Sola Escritura”…

Oración:

Amantísimo Padre Celestial:

Gracias por darnos tu Palabra que es fiel y verdadera. Ayúdame a vivirla por el poder de tu Santo Espíritu. En el nombre de JESÚS, amén.

Perla de hoy:

“¡Que muestre su vigor Satán y su furor!

Dañarnos no podrá, pues condenado es ya

Por la Palabra Santa.”

Interacción:

¿Qué me dice Dios hoy por medio de su Palabra?

¿Existe alguna promesa a la cual pueda aferrarme?

¿Existe alguna lección por aprender?

¿Existe alguna bendición para disfrutar?

¿Existe algún mandamiento por obedecer?

¿Existe algún pecado por evitar?

¿Existe algún nuevo pensamiento para llevarlo conmigo?