La sabiduría verdadera

Francisco Aular

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Lectura devocional: Santiago 3:14-18

Pero la sabiduría que proviene del cielo es, ante todo, pura y también ama la paz; siempre es amable y dispuesta a ceder ante los demás. Está llena de compasión y de buenas acciones. No muestra favoritismo y siempre es sincera. Santiago 3:17 (NTV)

Comenzamos citando una definición común de la sabiduría humana: “La sabiduría es un carácter que se desarrolla con la aplicación de la inteligencia en la experiencia propia, obteniendo conclusiones que nos dan un mayor entendimiento, que a su vez nos capacitan para reflexionar, sacando conclusiones que nos dan discernimiento de la verdad, lo bueno y lo malo.” Wikipedia. La Biblia nos dice lo siguiente de la sabiduría “que proviene del cielo”: “Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídala a Dios, y él se la dará, pues Dios da  a todos generosamente sin menospreciar a nadie.”(Santiago 1:5,NVI). Esta sabiduría espiritual por el contexto del versículo es la que nos capacita como cristianos nacidos de nuevo para enfrentarnos en nuestro diario vivir en esta tierra -como seres humanos que somos- “a las pruebas” y al mismo tiempo ser “muy dichosos”. Sabiduría no es la posesión nada más de conocimientos e información, sino una conducta ética que conduce a la “fe” y otras virtudes “porque está llena de compasión y de buenas acciones”, con variadas consecuencias espirituales que sin duda serán bendición a los que nos rodean como a nosotros mismos.

El apóstol Santiago nos legó una doctrina muy práctica en su carta universal. En primer lugar, nos habla de dos tipos de sabiduría, la sabiduría humana que es “terrenal, animal, diabólica”, y la sabiduría espiritual que nos viene de lo alto es decir, del cielo.

Sin duda, en los días en los cuales vino el SEÑOR JESUCRISTO a esta tierra, el mundo había llegado a la plenitud en varios aspectos: En lo religioso, en lo civil y en la sabiduría humana. Por eso, Jesucristo dijo: “El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado” (Marcos 1:15). Ciertamente, en el plano religioso brillaba como una luz en la oscuridad la Ley que Dios había dado a Moisés; en lo civil el Derecho Romano se imponía en todos los lugares del imperio romano; en la sabiduría humana es innegable el aporte del mundo griego, sus filósofos simplemente iluminaban con la luz del conocimiento al mundo entero.

Así que, JESUCRISTO vino en el tiempo perfecto de Dios para llegar con su mensaje de amor, fe y esperanza al mundo entero, y con Él, la sabiduría divina, por lo tanto, el cumplimiento de la profecía: “perecerá la sabiduría la de sus sabios, y se desvanecerá la inteligencia de sus entendidos” (Isaías 29:14).

En efecto, en JESUCRISTO tenemos la grandeza de la sabiduría divina y teniéndolo a Él, lo tenemos todo. No es la sabiduría que el ser humano ha buscado y que siempre está corrompida por las limitaciones de él mismo, pecador y su alejamiento de Dios.  Con razón el SEÑOR dijo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí” (Juan 14:6). Nadie tan puro como JESÚS de Nazaret, Él es la paz, por lo tanto es la sabiduría pacífica, lleno de la amabilidad en el cual, hasta los pecadores más hundidos en sus pecados, pueden mirar a JESUCRISTO y no temer su rechazo; JESUCRISTO es verdaderamente bueno sin dejar de ser justo; el pecador encuentra en JESUCRISTO una razón para vivir y morir, porque en Él no existe incertidumbre ni hipocresía. Con razón, el teólogo más profundo que hemos tenido, lleno de gozo, escribió: “Pero lejos esté de mi gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo” (Gálatas 6:14).

Oración:

PADRE ETERNO:

Te pido sabiduría de lo alto porque quiero que tu Palabra llene mis pensamientos, domine a mi corazón y me guíe en forma sabia en medio de este mundo para poder honrarte al vivir y actuar como un hijo tuyo, nacido de nuevo por el poder de tu gracia. Ayúdame SEÑOR, a ser un testigo eficaz con mi conducta diaria, que muestre tu gozo en mí, aún en medio de las pruebas y mis aflicciones. En el nombre de JESÚS. Amén.

Perla de hoy:

La sabiduría espiritual no es algo que poseemos, sino Alguien que vive en nosotros en el poder del Espíritu Santo: JESUCRISTO.

Interacción:

¿Qué me dice Dios hoy por medio de su Palabra?

¿Existe alguna promesa a la cual pueda aferrarme?

¿Existe alguna lección por aprender?

¿Existe alguna bendición para disfrutar?

¿Existe algún mandamiento por obedecer?

¿Existe algún pecado por evitar?

¿Existe algún pensamiento para llevarlo conmigo