Perlas del Alma
Pasaje devocional: Lucas 19.1-10
Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. —Lucas 19.9 (RV60… Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. —Lucas 19:10 Lucas 19:10 (RV60)
“¿Están realmente perdidos los seres humanos sin JESÚS?” Era el cartel que colgaba sobre mi cabeza cuando diserté sobre: ¿Quién es JESÚ? Los jóvenes cristianos de la universidad que me invitaron habían hecho un gran trabajo previo, el auditorio estaba lleno.
Me recibieron con un aplauso, y mientras me presentaban yo oraba que aquellos aplausos del inicio se convirtieran en alabanzas a nuestro DIOS. Al finalizar la conferencia 16 jóvenes hicieron la decisión de aceptar a JESÚS como SALVADOR y SEÑOR.
La Biblia, nos dice que los seres humanos sin JESÚS, están perdidos. Por eso, la Biblia es ante todo, la Historia de la Salvación del ser humano. Pero esto supone un estado anterior de perdición. Es como cuando un ladrón nos roba la cartera con su contenido, la cartera pasó de nuestro bolsillo al bolsillo del que se la llevó, pero no se habrá dañado, sino extraviado, no está en su lugar.
Así DIOS hizo al ser humano para Él, pero Satanás se lo llevó para su propio servicio, y ahora el ser humano, en relación con DIOS, está muerto: “Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia”. (Efesios 2:1,2,RV60).
Esto lo ilustramos mejor de esta manera: si uno en pleno verano compra un kilo de carne y sin ponerlo a refrigerar, se va de viaje por dos días, al retornar la carne se habrá echado a perder. El ser humano delante de DIOS estaba perdido y echado a perder.
El ser humano había descendido de ser un hijo o amigo de DIOS, a ser Su enemigo y esclavo del pecado y de Satanás. Así cuando éramos enemigos de DIOS, y perdidos para Su plan para el ser humano, vino JESÚS a buscarnos y reconciliarnos con Él.
De esta manera, en la salvación, DIOS toma la iniciativa en buscar al ser humano, aunque a veces pareciera que es el ser humano que lo busca.
Esto lo entendemos mejor con la historia de Zaqueo, el cobrador de impuestos y hombre muy rico, movido tal vez por la conciencia de pecador o por la curiosidad natural, vino a ver a JESÚS.
Debió haberse quedado mudo cuando JESÚS le dijo: “Zaqueo, date prisa desciende porque hoy es necesario que pose yo en tu casa” Zaqueo no sólo vio a JESÚS, sino que se convirtió en Su discípulo también. Debemos entender que la salvación no es algo, sino Alguien: ¡JESÚS morando en nosotros!
Aquella tarde en la universidad tambien expliqué que JESÚS mismo entendió que su venida del cielo a la tierra, es para la salvación del ser humano perdido en su relación con DIOS. Por muy duró que nos parezca Su lenguaje es limpio, sano y santo: Él, “vino a buscar y a salvar lo que se había perdido”. Esto lo entendí desde el mismo dia de mi conversión. Verdaderamente, el ser humano está realmente perdido delante de DIOS, y debe arrepentirse de sus pecados y pedir perdón y nacer de nuevo. ¡Investido por Su gracia, en esa misión ando, gloria al SEÑOR!
¡Adelante, siempre adelante!
Oración:
PADRE ETERNO:
¡Gracias por invitarme a ser tu hijo! Y ser parte de ti en esta sagrada misión de pasar este mensaje a otros: ¡Ayúdame a ser fiel! En el nombre de JESÚS. Amén.
Perla de hoy:
Dígale al SEÑOR que usted quiere ser un discípulo dispuesto y disponible para Él, todo el tiempo.
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