LA IGLESIA: EL MILAGRO DE LOS SIGLOS

¡Feliz domingo, día del SEÑOR, para todos!
Francisco Aular
"Las iglesias de Asia os saludan. Aquila y Priscila, con la iglesia que está en su casa, os saludan mucho en el Señor." (1 Corintios 16:19 RV60).

¿Nos ayudará esta pandemia que estamos viviendo a valorar lo que un pequeño grupo de seres humanos, llamado iglesia puede ser y hacer por un mundo en crisis? ¡Hacia allá vamos!:

Cuando uno lee en la Biblia, la presencia multiplicadora de las iglesias se queda asombrado porque la iglesia nunca se refiere al templo, sino a la gente. Es una asamblea local y autónoma de cristianos nacidos de nuevo y por lo tanto bautizados. Son adultos comprometidos y asociados en un pacto para exaltar el nombre de DIOS; edificar a los creyentes y alcanzar a su comunidad en un testimonio constante de su fe y practica, basada en su única fuente de autoridad: La Biblia.

Por otra parte, el “Nuevo Testamento habla también de la Iglesia como el Cuerpo de CRISTO el cual incluye a todos los redimidos de todas las edades, creyentes de cada tribu, y lengua, y pueblo, y nación.” (Fe y mensaje bautistas, pág.13).

En mi vida cristiana he andado durante 58 años, sirviendo al SEÑOR cada día y cuando la iglesia se reúne; he podido palpar la vida de las iglesias, desde ser primero la idea en la mente de un hombre o mujer de DIOS, nacer en una pequeña reunión en la sala o ¡hasta en la cocina de un hogar! ¡Gente inspirados por las palabras y promesa de JESÚS!: “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.” (Mateo 18:20 RV60).

¡No importa su nacimiento humilde, lo cierto es que la iglesia es un organismo divino-humano finito con probabilidades infinitas… Con todo conocimiento puedo afirmar que toda iglesia local, es un ¡milagro de DIOS viviente! Usted nunca se imaginará, -sin involucrarse en una iglesia local, - los milagros que hace el SEÑOR con un grupo de seres humanos imperfectos, pecadores perdonados, “vasos de barro”, inflamados por la Palabra de DIOS y el ESPÍRITU SANTO para cumplir con la visión histórica a la luz del destino eterno de la Gran Comisión: “Por lo tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Enseñen a los nuevos discípulos a obedecer todos los mandatos que les he dado. Y tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos.” (Mateo 28:19-20 NTV).

¿Cómo nacieron las iglesias del Nuevo Testamento? El Apóstol nos da una idea: "Aquila y Priscila, con la iglesia que está en su casa, os saludan mucho en el Señor." La Iglesia Cristiana, no tuvo templo, sino hasta bien avanzado el Siglo III de nuestra era. ¡Las iglesias locales, se reunían dónde podían, pero las casas era el lugar preferido y se derribaron las barreras sociales de tal manera que tanto los dueños de casas como sus familiares y esclavos, se reunían como un solo Cuerpo, con todo gozo y armonía!

Los historiadores del cristianismo de los tiempos apostólicos entre ellos, el afamado Dr. Antonio Piñero de la Universidad Complutense de Madrid, desde su perspectiva de “cristiano cultural- como él se autodefine- nos dice que aquel crecimiento espiritual y humano alcanzó un avance hasta del 40% del incremento de su membresía cada diez años. Ese movimiento fue tan poderoso que, desde el siglo segundo de nuestra era, hizo tal impacto que ni la persecución ni la muerte, pudo detenerlo. En tal efecto, ni el mismísimo Imperio Romano, lo pudo frenar.

Me alegra decir, que los testimonios del impacto de las iglesias locales están haciendo, hoy en la segunda década del siglo XXI, es un auténtico testimonio que contrario a lo que muchos filósofos habían dicho: ¡DIOS no está muerto! Y millones de hombres y mujer de hoy lo seguimos exaltando, enseñando y propagando y como lo dijo el Dr. Kendell H Easley:

“A través de Cristo, Dios en Su gracia está edificando un reino de personas redimidas, para gozo de ellas y para gloria de Él”.

Por todo ello, puedo afirmar que: ¡La Iglesia es el milagro de los siglos! ¡Alabado sea el SEÑOR!

¿Cómo nacerá una iglesia en tu comunidad para ser agencia del Reino y milagro de DIOS en ese lugar en dónde vives?

¡Planta una iglesia en tu casa! Algún día, cuando te vayas de este mundo, no te llevarás contigo ni tu casa ni tus muebles, ¡ni nada! Pero si inicias una iglesia en tu casa, estarás envuelto en el milagro de DIOS eterno: Su Iglesia.

Hoy tu iglesia te necesita. ¡Ven a reunirte con el milagro de DIOS a través de los siglos! ¡Te esperamos!

¡Feliz domingo del SEÑOR!

Pastor y amigo,

¡Adelante, siempre adelante!