Escribo esta salutación a las iglesias locales que se reúnen en el nombre del SEÑOR, estén donde estén. Yo he sido llamado a ser alguien que promueve el apoyo a cada iglesia o asamblea en un sentido “multidenominacional”… No sólo escribo a mi denominación bautista del sur en Estados Unidos, Puerto Rico y Canadá, con la existencia de unas 47000 Iglesias locales. Principalmente de habla inglesa, muchas hispanas y de otros grupos étnicos.
Una iglesia existe para:
1. PROCLAMAR el evangelio redentor de CRISTO. Cada iglesia local es una representación del Reino de DIOS en ese lugar en que celebra sus encuentros y actividades, mediante: la oración, la evangelización y la obra misionera. ¡Marchamos como misioneros de la Gran Comisión para esta generación! “Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo”. (Mateo 28:19,20, NVI). Nuestros departamentos de entrenamiento de carácter misionero son: Niñez, jóvenes, movimientos universitarios, unión femenil y la unión varonil.
2. EDUCAR al pueblo de DIOS al cual el Espíritu Santo, lo ha reunido para discipularlos en todos los niveles y formas que Él mismo SEÑOR nos ha señalado en Su Palabra, la Biblia. En nuestras iglesias cubrimos los distintos niveles de educación desde los recién nacidos con el Departamento de Cuna, hasta los ancianos que vienen para seguir sirviendo al SEÑOR hasta sus últimos días. Tenemos crecimiento en la doctrina a través de la Escuela Dominical, grupos discipulares, Institutos y Seminarios bíblicos.
3. SERVIR como prueba del amor de DIOS. La ayuda mutua es necesaria en un intento por suplir las necesidades del ser humano, en su breve jornada por esta vida temporal. Seguimos el ejemplo de nuestro Fundador JESÚS, toda su preciosa vida humana la invirtió en otros, Él dijo: “Nadie tiene mayor amor que éste, que es el poner su vida por sus amigos”. (Juan 15:13, RVC)
4. COMPAÑERISMO en el Nuevo Testamento encontramos al menos en 59 ocasiones que se nos exhorta a los cristianos nacidos de nuevo a tomar acciones los “unos a los otros”. Siendo hijos de un mismo PADRE, nos llamamos entre nosotros “hermanos”. JESÚS mismo nos ordenó: “En esto conocerán todos que ustedes son mis discípulos, si se aman unos a otros”. (Juan 13:35, RVC).
5. ALABAR a DIOS, esto lo hacemos por medio de la oración, cánticos, lectura de la Biblia. En realidad, el cristiano nacido de nuevo vive con un sentido de adorar y honrar a DIOS en todo lo que piensa, habla, es y hace: “Por lo demás, hermanos, piensen en todo lo que es verdadero, en todo lo honesto, en todo lo justo, en todo lo puro, en todo lo amable, en todo lo que es digno de alabanza; si hay en ello alguna virtud, si hay algo que admirar, piensen en ello”. (Filipenses 4: 8, RVC).
En realidad, hay muchas cosas para hacer en la IGLESIA en esta hora menguada de la humanidad: ¡Es ahora o nunca! Lo que el Apóstol Pablo, le aconsejó a su discípulo Timoteo, es más actual que nunca:
“Para que, si me tardo, sepas cómo conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad”.
(1 Timoteo 3:15, RVC)
Para todo esto y muchísimo más sirve la IGLESIA.
Mis amados todos, ya el reloj de DIOS se está marcando el retorno del Esposo de la Iglesia, nuestro amado JESÚS, por lo tanto, veamos lo que el mismo SEÑOR, nos dice en Su Palabra: “Mantengamos firme y sin fluctuar la esperanza que profesamos, porque fiel es el que prometió. Tengámonos en cuenta unos a otros, a fin de estimularnos al amor y a las buenas obras. No dejemos de congregarnos, como es la costumbre de algunos, sino animémonos unos a otros; y con más razón ahora que vemos que aquel día se acerca”. (Hebreos 10:23-25, RVC).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Déjanos tus comentarios