jueves, 8 de enero de 2015

¿Cómo enfrentar el futuro?

Francisco Aular
faular@hotmail.com
Lectura devocional: Santiago 4:14-17
¿Cómo saben qué será de su vida el día de mañana? La vida de ustedes es como la neblina del amanecer: aparece un rato y luego se esfuma. Lo que deberían decir es: «Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello». Santiago 4:14,15 (NTV)

¿Cómo enfrentar el futuro en lo particular? Desde luego, no soy el apóstol Santiago el cual lo explicó en tan solo cinco versículos, y comienza, diciéndonos:Presten atención, ustedes que dicen: “Hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad y nos quedaremos un año. Haremos negocios allí y ganaremos dinero” (Santiago 4:13). Su definición de la vida me deja sin aliento: “La vida de ustedes es como la neblina del amanecer: aparece un rato y luego se esfuma” (Santiago 4:14). ¡Nuestra vida biológica es breve! Aunque lamentemos amargamente el tiempo y las oportunidades perdidas, ¡no podemos regresar ni un segundo!
¿Cómo enfrentar el futuro en lo colectivo? Hoy en día, debido a los adelantos en la comunicación del mundo libre, en segundos sabemos lo que está ocurriendo en el mundo, y las noticias casi nunca no son buenas: “Se desmayarán de terror los hombres, temerosos por lo que va a sucederle al mundo, porque los cuerpos celestes serán sacudidos” (Lucas 21:26, NVI). En cuanto al futuro, nuestros contemporáneos se sienten aterrados e inquietos. ¿Qué pasaría si los fanáticos religiosos nos doblegan y triunfan? No tienen esperanza ni certidumbre en cuanto al porvenir. La arrogancia del ser humano ha menospreciado el amor de Dios y lo ha sacado de su vida, y hasta de su vocabulario. Santiago nos advierte que cualquiera sea el asomo nuestro hacia el futuro sin Él, no prosperará por mucho tiempo:Lo que deberían decirse es: “Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello” (Santiago 4:15).
¿Cómo enfrentar el futuro como cristianos nacidos de nuevo? En mi primer pastorado en la Iglesia Bautista El Buen Pastor de Maracay, en Venezuela. Invité como pianista a mi profesor del Seminario, mi siempre bien amado y recordado Rev. Efraín Silva Ovalles, y a su hermosa hija la soprano Maribetty Silva Meleán, y a ella le pedí que nos cantara uno de mis himnos favoritos: Nada sé sobre el futuro. El pianista tomó su puesto y la cantante su lugar, después de oírlos, nosotros quedamos impactados. Desde entonces, en todo evento que fue posible, Marybetty y su padre estuvieron conmigo. Y, alabamos al Señor por la música y por la letra de ese himno, en el cual su autor expresa la verdad de que para el cristiano nacido de nuevo, ¡JESÚS es nuestro todo! Como lo dijo nuestro hermano Pablo de Tarso: “Si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos o que muramos, del Señor somos” (Romanos 14:8, NVI). En Sus manos está nuestro futuro.
Nada sé sobre el futuro
Ira Forest Stanphill (1914-1993)
I
Nada sé sobre el futuro,
Desconozco lo que habrá,
Es probable que las nubes,
Mi luz vengan a opacar.
Nada temo del futuro,
Pues Jesús, conmigo está,
Yo le sigo decidido,
Pues Él sabe lo que habrá,
CORO 
Muchas cosas no comprendo,
Del mañana con su afán,
Mas, un dulce amigo tengo,
Que mi mano sostendrá.
II
Mi sendero es más brillante,
Cuando gozo de su amor,
Más ligeras son las cargas,
Cuando voy con mi Señor.
Cuando llegue a las mansiones,
Que en la gloria preparó,
Ya no más tendré temores,
Desengaños ni dolor.
III
Nada sé sobre el futuro;
Desconozco lo que habrá,
Mas, si Él cuida de las aves,
Él también me cuidará.
Y al andar por el camino,
En la prueba o tempestad,
Sé que Cristo irá conmigo,
Y me guarda con bondad.
Oración:
Padre eterno:
Hoy quiero mirar al futuro bajo tu mirada y tus cuidados, confío en los planes que tienes para mí, antes de la fundación del mundo, los cuales comprendí al conocerte como mi Señor y Salvador. Ayúdame, a confiarte lo que soy y lo te que tengo. En el nombre de JESÚS. Amén.
Perla de hoy:
Los que le creemos y confiamos en Dios podemos enfrentar el futuro, con fe, esperanza y amor.
Interacción:
¿Qué me dice Dios hoy por medio de su Palabra?
¿Existe una promesa a la cual pueda aferrarme?
¿Existe una lección por aprender?
¿Existe una bendición para disfrutar?
¿Existe un mandamiento a obedecer?
¿Existe un pecado a evitar?
¿Existe un nuevo pensamiento para llevarlo conmigo?


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Déjanos tus comentarios