Francisco Aular
perlasdelalma@gmail.com
VIERNES, 29 de julio de 2022
Lectura devocional: Hechos 5:34-42
Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesucristo. Hechos 5:42 (RV60)
Volviendo al tema de ayer: ¿Cómo nacimos? Desde nuestro primer día aquel 15 de agosto y con 25 jóvenes y cuatro adultos que allí estábamos, el surgimiento de consignas para alentarnos unos a otro, nacieron:
“Por cada uno: ¡Diez!”. “¡CRISTO murió por nosotros, por eso nosotros lo amamos!” “¡Plantemos a JESUCRISTO en el corazón de cada venezolano! ¡Hagamos que la primavera del Espíritu Santo, descienda sobre Venezuela!
Sin embargo, un lema en aquellos años, antes de las Marchas Evangelizadoras, decía: “cada bautista, un evangelista”, pero como ya sabemos, existe mucha distancia entre lo que se dice y lo que se hace. Yo había sido nombrado director del Departamento de Evangelización de la CONVENCIÓN NACIONAL BAUTISTA DE VENEZUELA, en febrero de 1976, en Valle de la Pascua dentro del marco de la “Reunión de Acercamiento” de aquel año. Sabía que la hora de la acción, había llegado para ayudar al crecimiento espiritual y humano de la obra de DIOS, y hacer posible que la Gran Comisión de nuestro SEÑOR JESUCRISTO, se convirtiera en nuestra razón de ser y el hacer. De todos mis contemporáneos es muy conocido: ¡eso lo intentamos con toda razón y de todo corazón! ¡Todavía falta mucho por ser y hacer discípulos, pero en eso andamos! ¡Alabado sea el SEÑOR!
Desde la perspectiva temporal -a más de cuarenta años de nuestro nacimiento como movimiento de DIOS-, como lo he señalado, todavía nos queda mucho camino por recorrer para llegar a donde queremos llegar, pero nos alientan los hechos que ya conocemos. Inicios muy pequeños como los del joven Gustavo Torres con sus compañeros de estudio de medicina en la universidad que trajo a CRISTO a vario de sus compañeros de estudios; o como el joven pastor de Maracay que evangelizó a sus vecinos. “Sus discípulos” se han multiplicado de tal manera que, prácticamente es imposible seguirles las huellas entre las multitudes.
Así estuvimos listos para nuestro nacimiento, aquel 15 de agosto de 1977, en el templo de la Primera Iglesia Bautista de Barquisimeto, nos llegaron 25 jóvenes y cuatro adultos. ¡Este hecho ocurrió, hace 45 años de aquel día inolvidable!
Enseñamos a los jóvenes que la evangelización es el esfuerzo de la gracia de DIOS obrando en el corazón del cristiano nacido de nuevo para llegar al corazón de los no cristianos. Evangelizar es una cruz clavada en el corazón del evangelizador al llevar la Buena Noticia de Salvación a “todo aquel” de Juan 3:16, con la finalidad de que hagan una decisión personal, como lo dicen las Escrituras:
“Testificando a judíos y a gentiles
acerca del arrepentimiento para
con Dios, y de la fe en nuestro
Señor Jesucristo.
(Hechos 20:21, RV60)
Por ello, enseñamos al creyente que el JESÚS SALVADOR debe convertirse en JESÚS SEÑOR de todo cuanto soy, tengo y hago. Todo nuevo convertido es rápidamente discipulado para que se convierta en parte de la obra evangelizadora en las iglesias locales. Por tanto, la Marcha es también, un movimiento de plantación de nuevas iglesias. Porque las nuevas iglesias son el resultado, de las iglesias que paren otras iglesias. ¡No existen atajos en la multiplicación del Reino!:
“Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada ciudad, así como yo te mandé”. (Tito 1:15). ¡Esos “ancianos” eran plantadores de nuevas iglesias en las grandes ciudades!
Desde luego que, aquel día en que nos pusimos en Marcha, no nos hemos detenido. Hoy en día, existe un evento anual para celebrar y dar gloria a nuestro DIOS; pero también el movimiento por su sencillez se realiza regionalmente y lo más importante todavía: la marcha de la evangelización como estilo de vida, en las iglesias locales a través de Acción 52 y otros aspectos de la evangelización perenne, nos está regresando a las posibilidades de ver el desafío hecho realidad:
“Y todos los días, en el templo
y por las casas, no cesaban
de enseñar y predicar a
Jesucristo.”
Hechos 5:42 (RV60).
¡Así nacimos y así andamos!
Todos los adultos que me acompañaron en aquella fecha, los veremos en la mañana de la resurrección en el inicio de la eternidad futura. Los entonces muchachos y muchachas que me acompañaron en aquella aventura inicial se han convertido en líderes de la obra nacional e internacional. En su gran mayoría han practicado y enseñado la evangelización personal, han demostrado en países y culturas diferentes, que la oración, la evangelización y discipulado ¡sí funcionan! Ellos marchan y no se detienen, oran, evangelizan, discipulan y plantan o ayudan a plantar nuevas iglesias, por dondequiera que van.
Por supuesto, mucho de ellos son “marchistas anónimos”, tal vez, nunca recibirán reconocimiento en esta tierra, pero sus nombres están escritos en un sitio donde jamás serán ignorados y borrados. Tampoco andarán solos en la Nueva Jerusalén, porque los acompañarán lo único que se pudieron llevar de esta tierra, al dejarla: ¡sus discípulos!
¡Venga ese abrazo marchista de Feliz cumpleaños!
¡Así nacimos!
¡Adelante, siempre adelante!
El primer cántico “corito” marchista:
Vivir con JESÚS es cantar
Vivir con JESÚS es reír.
Es sentir el calor de llegar
Y sentir el calor de partir. (bis)
Tralalalalalá…..
Más nunca te has de olvidar
Que hay gente viviendo en dolor
Predicar nuestro CRISTO es vivir
Y vivir es mostrar Su amor…
Predicar nuestro CRISTO es vivir
Y vivir es mostrar Su amor.
Oración:
PADRE DE LA EVANGELIZACIÓN:
Aquí traemos delante de Ti en este día lo que te prometimos hace 45 años en aquella noche de vigilia en el templo de la Primera Iglesia Bautista de Barquisimeto: les testificaríamos a los perdidos de la Vida en ti. Sabíamos por fe que, miles de personas nacidas de nuevo, hoy darían testimonio de su fe en ti, en un movimiento continuo de ser llenos del poder del Espíritu Santo para ser testigos tuyos hasta el final de nuestras vidas. ¡Ayúdanos a terminar la carrera con tu gozo y con tu gracia prometidos! En el nombre de JESÚS. Amén.
Perla de hoy:
Nuestro encuentro personal con DIOS nos pone en marcha y en obediencia iremos por todo el mundo proclamando el Evangelio “a todo aquel”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Déjanos tus comentarios