martes, 9 de febrero de 2021

¿CUÁNTO VALE UNA ORACIÓN? (1-2)

 DÍA 37: 40 días de oración con propósito
(4 de enero al 12 de febrero 2021)

Operación 6*3*9 en acción:

6:00 AM. Liderazgo pastoral y su familia

3:00 PM. (Hora de la muerte de JESÚS). Su

patria, sus gobernantes y los del mundo.

9:00 PM. La familia modelo de DIOS al crearla. 

Perlas del alma

(Basado en el libro: La hora que cambia al mundo, Dick Eastman)

Francisco Aular

faular@hotmail.com

Lectura devocional: Romanos 15:22-33

¿CUÁNTO VALE UNA ORACIÓN? (1-2)

Versículo de hoy: 

Mis amados hermanos, les pido encarecidamente en el nombre de nuestro Señor Jesucristo que se unan a mi lucha orando a Dios por mí. Háganlo por el amor que me tienen, ese amor que el Espíritu Santo les ha dado. Romanos 15:30 (NTV)

 

“Cuánto más oración haya en el mundo, mejor será el mundo, más poderosas serán las fuerzas contra el mal en todas partes. La oración, es una fase de su operación, es desinfectante y preventiva. Purifica el aire, destruye el virus del mal…Dios moldea el mundo mediante la oración”.

E.M. Bounds

“Para poder adquirir el arte de orar, hay que cumplir ciertos requisitos. Los principales son dos: práctica y perseverancia. Sin la práctica, ningún cristiano llegará a ser una persona de oración”.

Profesor Hallesby

 

¿Cuánto vale una oración? Para responder esto tendría que remontarme al 19 de mayo de 1955, en San Felipe, Edo. Yaracuy, Venezuela. Una madre campesina, se está despidiendo de su niño de 9 años, porque aquel niño enfermo de paludismo viajaría a la Capital Caracas. Una pareja matrimonial, había venido de lejos, y el niño había viajado para conocerlos. Todos sabían en aquella casa, menos el niño lo que estaba pasando. Por ello, salieron y dejaron solos a la madre y al niño. Hubo detalles muy hermosos que la madre y el niño, unidos como eran, hicieron juntos, entre ellos orar. El niño le pareció extraño ver a la madre, abrazarlo y estrecharlo contra ella mientras lloraba porque ella no era dada a expresar sus sentimientos de aquella manera. 

 

Entonces, la madre le dijo al niño: “Sé fuerte y valiente”. Luego oró por el niño. Aquel niño salió con su primo Antonio, a la barbería, pero al regresar, la madre se había ido… Se habrán dado cuenta que aquel niño, ¡era yo y mi amada madre! Mi papá, no había tenido valor para acompañarnos. ¿Cuánto vale esa oración de mi madre?... 

 

Unos años después, visité en mi pueblo, Albarico, a mi tía Blasita de Sánchez, la primera cristiana evangélica de mi familia, la visité en su casa…Me cantó el himno: “La tierna voz del Salvador”, mi papá decía que su cuñada cantaba como los ángeles. Además, mi tía tuvo valor para orar por nosotros, e intercedió para que yo llegara a conocer a CRISTO. ¿Cuánto vale la oración de mi tía?

 

Por aquel tiempo, un cristiano evangélico, vendedor de lápices que andaba por el Centro de Caracas, y acostumbraba en su recorrido pasar por el Estudio Fotográfico: Luz y Sombra en dónde yo trabajaba, me predicaba el Evangelio y oraba por mí. Se llamaba Miguel López, y era miembro de la Iglesia El Centro Evangelístico de Caracas. Llegó a ser tan frecuente en sus visitas, que hubo un tiempo en que me escondía de él. Pero el hermano Miguel, no dejaba de orar por mí, y no pude esconderme de esas oraciones. ¡Hasta el día hermoso que vine al SEÑOR! ¿Cuánto valen las oraciones del hermano Miguel López?, quien ya está en la presencia del SEÑOR! 

 

Y por favor, -no le cuente esto a nadie-…El libro “La hora que cambia al mundo”. Fue traducido por Francisco Liévano, como lo conozco y admiro, me imagino que ese hombre mientras traducía al libro, oraba por fe que nosotros los miles de lectores en nuestro idioma, llegáramos ha ser hombres y mujeres de oración. ¿Cuánto valen esas oraciones?

 

Ahora bien, ¿Cómo desarrollamos un hábito intencional en nuestra oración diaria? La verdad que no espere que DIOS, lo llame a orar, es asunto de nuestra decisión y de manera intencional, ser una persona de oración. Sin embargo, aquí van unas sugerencias del libro: La hora que cambia al mundo:

 

En primer lugar, busque usted el mejor tiempo para la oración personal. No descarte la oración matutina para su hora devocional, eso sí, acuéstese más temprano y levántase más temprano. 

En segundo lugar, declare verbalmente su compromiso cada día, de su cita con el SEÑOR. Como es una cita con DIOS, escoja un lugar para estar con Él…Desde muy joven en el SEÑOR, desarrollé el pensamiento de “no dejarlo esperando por mí” …

En tercer lugar, luche denodadamente contra toda interrupción. Por favor, no encienda el celular, ni la computadora. Pablo habló en varias ocasiones de que la vida cristiana es una lucha y consiste en pelear “la buena batalla” (1 Timoteo 6:12).

En cuarto lugar, prepare un plan práctico de oración. Ande preparado para descubrir y anotar los motivos de oración para su tiempo con el SEÑOR.

Finalmente, reconozca la extraordinaria importancia de la hora que usted pasa con DIOS.

 

Por mi parte, aquí me quedo, alabando a DIOS por ti que me estás acompañando y sigues conmigo en los últimos cinco días para llegar a nuestra meta de los 40 días de oración con propósito, este próximo viernes 12 de febrero. ¡Tienes que estar pendiente porque hoy, o tal vez mañana, te daré una gran noticia y una invitación para unas horas de oración unida! ¡Completaré algunos detalles, y listo! ¡Espera la convocatoria y también anhelo tu participación en esas horas con el SEÑOR juntos y unánimes!

 

¡Señor enséñame “A conocer el valor de nuestras oraciones! ¡Pongámonos en marcha y oremos porque será siempre un valor agregado a todo lo que somos y hacemos para la gloria de DIOS!

¡Adelante, siempre adelante!

 

Oración

PADRE y ÚNICO SABIO DIOS:

¡Alabado seas y gracias por enseñarnos a orar y el valor de nuestras oraciones! ¡Ayúdame a orar y mostrar tu carácter en todo lo que soy y hago! En el nombre de JESÚS. Amén.

Perla de hoy:

Estamos en la hora para cambiar al mundo por la oración ¡oremos juntos!

Interacción:

¿Qué me dice DIOS hoy por medio de su Palabra? 

¿Existe alguna promesa a la cual pueda aferrarme?

¿Existe alguna lección por aprender?

¿Existe alguna bendición para disfrutar?

¿Existe algún mandamiento por obedecer?

¿Existe algún pecado por evitar?

¿Existe algún pensamiento para llevarlo conmigo?


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